jueves, septiembre 27, 2007

Memorias de un croto (Primaveral recargado)

Naturaleza sangre....

¿Te acuerdas? ¿Cómo jugábamos a sentir el frío en los cuerpos?, tu con los pies congelados como raspadillo, yo con ese calor insoportable en las manos. El tema era entibiar tus plantas o enfriar mis palmas, dependía de la perspectiva, del lugar, del aroma de la noche. Te gustaba jugar a la morgue, así como de niña jugabas a la cueva y te tapabas con un edredón oscuro para que el monstruo no te toque, te quedabas inmóvil para que no te muerda cada esquina. Si, te gustaba, el juego de ponerte rígida y desnuda encima la cama como una tabla, decías que el efecto era mejor luego de la ducha y con la piel toda erizada por el frío. Anticipabas recurrente tu imagen ideal de la muerte en el río o el vuelo del puente pero sola.

Pálida de agua me pedías que te coma a besos, que muerda tus lunares en el pecho y tape tus poros con el calor rosáceo de mi abdomen. Me acuerdo flaca, de tus pataletas, de tu histeria en el suelo, de la bronca que te daba, cuando sólo te miraba en silencio, en el pesado desprecio de cerrar la puerta y dejarte llorando en mitad de la sala.

Es difícil olvidarte, cada vez que vuelve aquel torbellino de emociones inflando tus ojos saltones de furia, esos capaces de jugar a la mirada de virgen y en dos segundos botar fuego en mi vientre, llorar miel de madrugada. Me acuerdo que me gustabas serena, indefensa, dócil. Las madrugadas eras vulnerable, dejabas que tus defensas caigan, y lanzabas esos cursis te amo como ronroneo, mientras yo jugaba a contar los vellos de tu espalda, de tu sangre morena. Tantas veces pensé en que pasaría si te lanzaría un vaso de agua en una de tus rabietas, ¿me perseguirías por la casa, cómo en esas reconciliaciones, o ¿acabaríamos a los mordiscos y arañazos?, sintiendo el dolor ese que produce el sexo de lija.Si flaca, pensé en eso, también en partirte a patadas, pero sabes que mi naturaleza sólo permitía destruir a tu niña mala con caricias de lengua, bebiendo tu frío de raspadillo, barnizando cada poro tuyo. Flaca, no sabía nada de ti aquella noche que respondiste a mi beso con una patada y no dejaste que mordiera el tatuaje falso, no sabía nada y hoy te entiendo, sólo querías el anonimato.

Ayer me enteré, te encontraron con la piel erizada y seca. Dicen que salías con un abogado, uno de bufete con muebles de roble y floreros con nardos made in China. Te vieron, en el boliche ese para secres de la 20 de Octubre, saliste mordiéndole la corbata a mierdazos, como solías hacer cuando querías mi plata para tu tatuaje permanente en las cejas. Si flaca, ¿te acuerdas? Tu manía de jugar al muerto y tu certeza en que te irías antes, tu pedido de que guardé tus cenizas en una urna de plata. Te dejé hace tiempo, entenderás ahora que era absurdo hacerte un homenaje de ese tipo, además debo confesar que te ves mejor , toda muda en esa lata que en una urna, aunque esos puntos lila no quedan "fashion" en tu mejilla derecha y tus labios de riñon hinchado, aunque pálidos, siguen dando hambre.

Si flaca, ya se que anoche te torció el pescuezo y te fue exprimiendo como tallo de rosa primaveral. No le importaron tus espinas, esas pincha risas de las que me escapaba, se quedó con tu mirada orgásmica, gran error yo solía esconderla con mis manos en tus labios. Me dijiste que por fin entendiste eso de que las miradas congeladas forman espasmos, cuando viste sus ojos inyectados lo supiste.

Estabas jugando a la ducha, al juego del cuerpo en la morgue y el abogado no entendía, tenía las palmas secas, más frías que el raspadillo de tus plantas, no entendía nuestros juegos. De pronto entro la de ojos grandes y rollos de canela en las costillas y el se dió la vuelta flaca, ese tal vez fue el error, yo no lo hubiera hecho o quien sabe, tal vez me hubiera lanzado por la ventana para evitar conflictos. A ella no le gustó la mirada congelada en tus ojos, es que era la titular, una gorda con poco charmé, pero la titular al fin.

No entendía la escena, tu toda desnuda y recostada y él de espaladas. Se lanzó a reír sobre tus piernas, con el típico recurso de las uñas en el pescuezo y el abogado se quedó, con el pis mojando sus calzones de esperma angustiado, dentro del ropero, eligiendo su corbata para la audiencia del lunes.

Tu flaca te enredaste en arañazos con la gorda, hasta que el seco puñete de empanada hundió tu pómulo y dormiste.Te debía haber dicho, los abogados odian las urnas, no les gusta el gris de una presencia todos los días en sus pensamientos, prefieren llevar flores al cementerio los domingos a una gorda. A los mediocres les gusta el anonimato para el romance y los juegos, cuando se abre el telón se mean. Te lo había dicho tantas veces, pero preferiste tu terquedad de quedarte en eso de que no eras sumisa, en la pulseta de genero en un país machista.

Ya ves, yo tiré la puerta ese día y te mandé a rodar, tú optaste por ser la sin nombre en la vida de un mediocre. Para ser honesto, estaba más a tu altura un final con raticida, era más coherente con tu personalidad compulsiva, pero no, terca como siempre escogiste la escena patética del gordo infiel y su mujer arañándote los pechos.

Si flaca, anoche me acorde de ti, de cómo te dejé en el anonimato y como querías seguir jugando nuestro juego. Tranquila mi flaca, seguró escucharás risas, ya verás y tocarán de nuevo tu piel, esta vez de lija y en algún lado, así llena de cosquillitas, verás como alguien se emociona y siente mariposas en el estomago al mirar tus labios.

Ya verás estará todo bien, no duele tanto y al final tu piel está como te gusta, rigida y fría. Aunque sin mis poros, coqueta como siempre, te quedarás mirando el mandil blanco del chango que te corta y disfrutarás en paz las manchas de salteña goteando sobre tu panza abierta.

lunes, septiembre 17, 2007

Optimismo Gaseoso


¡Viva el optimismos revolucionario! una buena boina ayuda a que no nos mojen los meos de Coca-Cola.

jueves, septiembre 06, 2007

Dale Loca (De Memorias de un Croto)

La sabiduría llega cuando no nos sirve para nada….son las reglas del destino, son las reglas del amar (Fito Paez)

Te estas cagando de frío loca, eso de salir del boliche todos los días a las 7 de la mañana se queda en los huesos. ¿No ves? ,la acera no está hecha de espejos que reflejan tus estrellas, está llena de charcos y esas burbujas que revientan se llaman cerveza, flotando en el pis de tus clientes. Camina cruza la calle de un salto, que mi espalda hueca no sabe jugar al principe. No tengo ganas de tapar la mierda del piso con mis huesos, soportando tus tacos aguja en mis vertebras.

Me duelen los pies flaca, a veces queman los recuerdos dice Fito golpeando el piano, en su último disco. Lo pirateé para vos, me acordé que te gustaba reverbar en sus melodías, con los ojos rojos como esa bossa trucha del flaco, aunque no sabías que putas era un bondi, pero te identificabas con lo de un poco de coca y promesas de amor.

Vení, esta lluvia es sólo un espejismo que anuncia la primavera, como el aura esa que ilumina tus ojeras a las 6 de la mañana. Te traje mentisán loca, te arderá un poco, pero siempre es útil para curar las lamidas en los muslos, las del tubo de aluminio y las de lenguas de lata empapadas de ron barato.

Loca hoy me acordé del puente, de la historia de la niña que lo cruzaba arrodillada hasta el lado de Miraflores, grafiteando fragmentos de la Biblia. Me acordé de la noche en que te conté la historia del papel higiénico enredado en los tobillos y la caída explotando cráneos, siempre lo quisiste probar, me decías que seguramente tu sangre se evaporaría con el olor de las cloacas.

Tanta ficción añeja durmiendo en el cajón, tanta prosa barata hace que me acuerde de las caminatas aquellas y las ganas que te daban de tomar un café escuchando "ponme la mano aquí Macorina "en la voz de la Chavela, en ese viejo antro con piso de madera crujiente y paredes llenas de fetiches. Macorina, te sonaba a una mujer con celulitis decías, por la mandarina que evocaba en tu memoria.

Te gustaba ¿te acuerdas? que te mirará, así todo pirado, jugando a encontrar tu inocencia en esos ojos de muchachita punk. Te reías, mientras lanzabas la seria advertencia de que no contará los minutos, ni las veces que tocaba tus pechos, que preferías un presente congelado, un disco rayado repitiéndose, en el que saltaran tus piernas en el que temblaran mis labios. Un instante eterno sin proyecciones de ningún tipo, sin jaulas muerde alas.

Acá estoy, te traje el paraguas doblado, fetiche espanta cuervos. Dejé de abrirlo en mitad de la sala para conjurar la resaca como me recomendaste, ya no funciona para ahuyentar la luna, pero todavía es útil para espantar el viento. Ven, te agarro la mochila y las monedas que guardaste en la falda, necesitamos darnos dos sopapos y escupir esa espuma roja, que últimamente tragamos al soportar la extraña sobrevivencia. Necesitamos aquellas cosas que el tiempo fue borrando en tus pupilas, fue durmiendo en mis ojos, para volver a empezar, lejos de alguna rutina gris. Volver a empezar, temblando de frío y de lluvia en las pieles, lejos de esta mierda.

Te traje también el sobrecito que me pediste, don Enrique está cada vez más jodido con esto de llamarlo en la madrugada, ten cuidado que la ultima vez me vendió vidrió molido y no pude "venticuatrear" esperando tu retorno. Te lo traje igual, aunque luego tu tabique se llene de caspa y tu corazón reviente ácido sin mis besos.

Flaca, te lo dije tantas veces, pero te entercaste en permanecer colgada en eso de ser bailarina, en mearte los calzones cada vez que te invitaba a bailar un tango debajo el marco de la puerta. Mecanismos de protección e independencia le llamabas, ya vez preferiste tu libertad en este trucho club que jugartelas.

Te meabas cada vez que te decía que la caída del puente sería fácil. Te lo dije y preferiste el destino simplón de inflar la panza con el hule Pantera y contar billetes en la madrugada. No te juzgo, al final yo te lancé a esto, yo fui el que abrió la cuenta en el banco para que se llene de los bamboleos de tu cadera. Al final en esta tu libertad, seguimos clavados hueso con hueso.

Si ya sé que tengo la cara seca y toso como perro, tus cremas, esas que usas de noche, no sirven para maquillar mi sangre. Déjame así, penetrando algún viejo agujero mientras te espero, tengo la cara filuda por que la comida ya no me hace bien, el virus es jodido y me está comiendo y lo sé, pero si no era el puente el que nos mataba, iba ser esta joda más lenta.

Necesito tu vitamina, por eso vine temprano, luego de recordar tus lunares en el insomnio, pensando en las manos callosas que los tocan en mi ausencia. Vine para darte mi abrazo y desearte suerte. Te compré también dos anticuchos, no te preocupes la gorda es buena onda y me presta los platos y no tenemos que caminar hasta la esquina a devolverlos. Podemos comer despacio mientras subimos el puente.

Ven no seas terca, comé algo y contamé, cuantas historias de políticos te aguantaste anoche, cuantas pulseritas besaron tu muñeca. Veni, estas cagando de frío, no te voy a tocar si no quieres, aunque la verdad merecerías que te arranque los pétalos de tela tan Kitsch con los que te disfrazas para calentar al gordo del ministerio. Te haría bien que te muela a palos como te gusta, aunque en el fondo sabes que mi machismo muere en el olor de tus piernas.

Mereces eso y más, lo sabes, por haber caído en la recurrencia de ser independiente, con el billete fácil, pero tranquis que sólo nos fumaremos algo hasta que te ronques y yo vuelva a las mil pajas mentales de pensar que hago acá velando tus pesadillas.

Tu la niñita de papá, la chiquita bien, hoy sales del Boliche de neones y perfume dulzon, con el Jean que te regalé y los tacos aguja tan falsos. Te miro, cansada mientras disfruto como me muerdes los labios con tu sabor cargado de bocas de derechista y me bañas de tu aroma de dólares húmedos de vientre.

Veni mi changuita, igual estoy acá, aunque dicen que un par de patadas te vendrían bien, los cuates me dijeron ayer que por que sigo contigo, que debería ir a España, para aprender a patearte sólo en el tatuaje. Dicen que ahí no se nota y luego no me acusarás con eso de la violencia familiar.

Tranquis loca, sabes que sólo divago por que roncas y no me dejas leer tu libro ese de mujeres creando. “Ninguna mujer nació para puta”, ya lo sabía y yo tampoco nací para jugar a tu alcahuete, pero loca estamos así, al menos la casa tiene living nuevo y podemos pensar en el viajecito ese a tu pueblo que tanto esperas. Le contaremos a tu viejita, la mamada esa de tu pega de secretaria, de que estas terminando tus cursos de computación y de que su nieto ya dice mama.

Compré un estante para tus libros loca y esta 22 larga en la feria de El Alto, ese fin de semana que te fuiste al lago ¿te acuerdas?. Pensaba que hoy podríamos tirarnos en la alfombra y besar las sombras, leyendo esa poesía cursi que te encanta, antes de apagar la luz y volver a morder la ausencia.

Si lo sé, me lo dijiste tantas veces, que eran sólo unos meses de mirar el techo y de pinchar la espalda en el colchón del privado, pero es que me da impaciencia ver que el laburo no da y que te estas gastando y yo muriendo. Con esto de la inflación y las pastillas ya no da.

Entiendo lo que dijiste, la poesía no llena la panza, pero al menos me paga el trago mientras espero tu salida. Entraría a mirarte bailar en la barra, pero el gordo de la puerta me tiene bronca y lo sabes, prefiero mirarte con luz de día y caminar luego cagando de frío a tu lado, es meno cursi, más real.

Loca veni, estás temblando, te apareció otra mancha en el cuello y si, también yo tengo los pies helados. ¿Quierés subir el puente?, traje un rollo de papel higiénico para lanzarnos si quieres. ¿Mejor no?, OK, esta bien.

Apoyate en mi hombro flaca, más tarde pensaremos en como recuperar la guagua, ya verás que la monja se aburrirá pronto y si no, un mejor destino que con nosotros seguro que tendrá. Veni, pásame las llaves y cerrá los ojos, una punta de coca nos va a hacer bien. Sentime y no mires el charco, ya te dije que es pis y no el espejo de tus estrellas.

Dale flaca, despertá, esta no tiene vidrio aspira hondo y no tiembles que yo agarro bien la pistola. Confía en mí flaca, si el tiro falla igual seguiremos juntos.

Nota: Violencia familiar, nequidad de género, prostitución, drogas, VIH, La Paz de noche, no tapes el sol con un dedo.