viernes, diciembre 30, 2005

Salud último viernes

Ultimo viernes del año, es justo y necesario despedirlo como se debe, con cerveza fría y Rock and Roll. Estoy en la Zapla Avaroa, lugar de tantos combos hace años atrás. En un café, esperando a ella de ojos miel y caderas afiladas, con ganas de tomar un buen vino, luego caminar la Belisario y solamente beber los restos del 2005 en las paredes secas, en los poros y labios de Sopocachi del alma.
Recogeré los despojos de mi ciudad, la mierda esparcida por el asfalto roto y me reiré de mi mismo al alba, cuando el Illimani me haga un guiño rojo y mis ojos inyectados de tanto eter solo atinen a gritar...La Paz, es una muela careada llena de sed y soledad...La Paz pasa el tiempo y cada vez te quiero mas!
Que los espectros que poblaron mis paredes este año queden bien muertos y enterrados, que su mirada y el eco de sus risas sean la espada para comerme el nuevo año que empieza.
y como diría Fito...nos veremos en la calle y en concierto, yendo tras algún perfume de mujer, ya nos vemos en el 2006, una buena estrella tambien viene con él...buena estrella para todos...en especial para vos...

jueves, diciembre 29, 2005

Verde

Llueve, mi ciudad se cubre de gris y mis ojos se dilatan rojos. Estoy vestido de verde, llevo la barba de 10 días, vi tres películas seguidas, entre ellas Machuca, la cual no deja de rebotar en mi cabeza, no deja de gritar su historia.

Estoy con el llanto roto en el rostro y la impotencia que destruye mis ojos..

martes, diciembre 27, 2005

La Broma

Calle Loayza, cuatro de la tarde, hace una hora leía La Broma de Kundera en un trufi y ahora camino por el centro pensando en la Praga comunista de los años 50. De pronto el azar me encuentra con ella, cabello corto, no más de veinte, camina con una sonrisa en el rostro leyendo también La Broma, sin mirar a nadie, toreando a la gente.

Pienso en la casualidad y de pronto me encuentro con un mimo, de nombre Wálter, tiene más de sesenta, me dice que volvió de Europa luego de cuarenta años porque quiere regalar sonrisas en el país antes de morir. Está parado en la puerta de un lugar de fotografía, esperando una moneda para moverse, algunos ríen, los más lo ignoran, los niños tratan de tocar sus lágrimas de carbón y yo me siento a mirar su arte.

Tengo resaca electoral y ganas de cambio, lo miro a él que decide volver cuando otros se van y vuelvo a mi experiencia de jurado el anterior domingo. Recuerdo a Max, delegado de gorra azul, puntual y con temor a decir lo que piensa, a su compañera con rabia en la mirada, mientras recontaba votos. Ellos en una esquina con bronca muda y esperanza en el futuro. Al otro lado, los de gorra con estrellita blanca, en primera fila fiscalizando con celo y desconfianza cada voto.

Recuerdo también al señor de 86 años reclamando su derecho al voto, negándose a entender el concepto de depuración, mientras yo arrepentido de no saber aymara y no poder explicarle por qué no puede votar.

Cerramos la mesa y Max guarda tímidamente la copia del acta en su chamarra, mientras la de gorra roja, entre tuteos y risas, me pide un certificado de sufragio para su marido que no vino a votar. Claro, si ya pasamos todo el día juntos, una ayudita no hace mal a nadie; al final, como alguien diría, no es corrupción, es viveza criolla. Sólo atino a mirarla y guardó todo lo sobrante en el ánfora con rabia.

Hoy después de la farra electoral espero que lo que venga traiga menos prebenda y mayor honestidad, que la joven que lee a Kundera crea en el país y el amigo mimo sea un augurio de que más gente vuelva.Mi café se enfría, algunos viejos políticos en la mesa de enfrente apuestan cuánto dura el Gobierno. La broma de Kundera toma cuerpo en su risa; “el optimismo es el opio del pueblo”, me dice el personaje del libro y me niego a aceptarlo. El país está cansado del derrotismo y tiene derecho a creer en el cambio. Al final, ya decidimos, ahora a tener paciencia. Me saturé de las elecciones, el café está frío y hace media hora que trato de terminar un verso pero ánfora no rima con estrella.

La Prensa, 25/12/05

martes, diciembre 20, 2005

20.12.05 Café Club de La Paz


La resaca electoral esta pasando, tomar partido fué una opción dura y que entraña sin duda riesgos, pero había que correrlos. Hoy me siento en la esquina aguda y filosa del café más tradicional de mi ciudad "Club de La Paz" en la mesa en que debatieron tantas veces Lechín, Zavaleta, Marcelo y otros tantos, busco encontrar en estas paredes las palabras de aquel pasado, los sueños de un mejor país, lo que hubieran dicho aquellos pensadores sobre lo que viene y disipar los fantasmas de caos, una venganza social y sangre. Se también que cambios como estos de modelo, de estructura no se darán en cinco años e implican ir contra la corriente y paradógicamente medidas de costo social ¿Quienes pagaran ahora el precio? .
Pienso eso y más con una taza de café expreso, mientras la mesera me pregunta de que periódico soy, por que saco fotos al lugar y simplemente le digo que soy un paceño más tomando café.
Abro mi libreta y empiezo a escribir la crónica para el periódico, mojando en mi café cada uno de los recuerdos del 18 de Diciembre, de mi experiencia civica como jurado. Luego haré poesía, es necesario, el cuerpo me está pidiendo versos entre tanta política

lunes, diciembre 19, 2005

51%

Ahora a ponerle el hombro al país a apoyar al gobierno, a tener paciencia, a dejar gobernar, a ser coherentes, a fiscalizar y a ser parte activa del cambio.
Una nuevo país se diseña a partir de hoy, donde la democracia será más participativa.
Suerte EVO, no defraudes nuestro voto.

sábado, diciembre 17, 2005

Tomo Partido y tengo esperanza


Mañana hay que votar, tenemos la suerte de elegir a nuestro gobernante, muchos no la tienen, no la caguemos. Por primera vez el país vive un empate social, dos claras tendencias disputan el poder. Tuto, representa la clase política que institucionalizó la corrupción y se hizo rica a costa del país dejando que miles se empobrezcan y unas cuantas familias se llenen de dinero. Es hijo adoptivo de un dictador y se da el lujo de decirnos arrogante que el tiene capacidad, autoridad y es capaz de ofrecernos paz social.
El Mas, representa a los movimientos sociales y aglutina a todos los que creen en un mejor país, con mayor justicia social y equidad y es actualmente, la expresión de todos los sectores marginados de la sociedad y representa la lucha por la identidad, autodeterminación, soberanía y dignidad.

La generación que votará por primera vez, tuvo la suerte de nacer en democracia, otros vimos como nuestros padres lucharon por conseguirla, vivimos nuestra infancia, viendo tanques en las calles y temor al toque de queda, miedo de que tu viejo no llegue por que lo balearon. Pero también crecimos con el ejemplo de la coherencia ideológica, con las oraciones de Luis Espinal en el bolsillo, con la imágen del Che y fuimos aprendiendo que este país no se alquila ni se vende.

Este domingo tomaré partido y votaré con claridad, por un verdadero cambio, por que el poder sea esta vez de los menos. La historia se encargará de juzgar mi voto, sin embargo tengo esperanza que luego del Domingo, podré ayudar con mi decisión a dejar un país más justo, con menos discriminación y mayor equidad para mi hija.

Piensen y no se dejen mamar con el miedo que nos quisieron meter los de la estrellita blanca.

viernes, diciembre 16, 2005

Kaluyo y Potter

San Miguel, 7 PM del domingo, lugar llenos de risas falsas, donde el aroma de café se abre paso entre perfumes y charla light de cirugía y moda. Aparecen ella a quien no veía hace mucho y un amigo músico, surge la idea de ir al Teatro de Cámara a ver la obra de la Oveja Negra. Llegamos tarde, la obra empezó hace diez minutos, nos acercamos a la puerta, una señora nos niega la entrada, gente tarde perturba la puesta en escena, nos dice. No sirve de nada, decir que conocemos a los actores, el teatro ya cerró para nosotros y no habrá repete, debemos irnos.

Salimos y decidimos obedecer la moda global e ir a la función de tanda del hechicero light, caminamos y de golpe se abre el telón de mi ciudad. Estamos en La Comercio, esa mixtura de gente con gritos y mercaderes que venden de todo. La amiga tiene miedo, no es San Miguel y pide ser escoltada en la caminata.

Me pierdo en el montaje de esta escena, pensando en la obra que no vimos. El descenso es lento y la charla toma un tono banal, de pronto, la verdadera obra se despliega con magia, cuatro niños potosinos, al final de la calle haciendo música. La luz naranja de un farol de La Plaza, ilumina sus trajes. No tienen más de cinco y se mueven mal acompasados, en un juego de Kaluyo mal tocado y susurrado en quechua y sin embargo parecen felices. Su públicol, los objetos de un puesto de dulces, chocolates, galletas, cigarros, papas fritas, etc. todo apilado en tonalidades naranja escucha en silencio la obra. La gente, apurada, hasta en domingo, sigue su curso, no piensa, los niños solamente son parte del montaje.

La obra ya empezó, no importa, ésta vez tengo un papel en ella, soy extra, bufón burgués, con camarita, aroma de café y perfume. La amiga, compra galletas, se asoma a verlos con una mano en la cartera y la otra cerca de su nariz, ellos solo ríen, no paran de cantar, no le entienden. Los actores pasan frío y hambre, juegan con charangos de tres cuerdas desafinadas. La hermana mayor mira detrás de un puesto, es la apuntadora, directora, madre, todo, de rato en rato vuelcan las uvitas de sus ojos hacia ella, mientras se acerca y pasa revista a dos jarros blancos y a uno rojo para ver la recaudación.

El amigo músico, saca fotos con un celular, mientras yo me pierdo a la simpleza del acto y pienso en el 18 de diciembre, en como las promesas se perderán luego de la euforia, en la sangre que ojala no moje de nuevo estas calles. Salga quien salga que no vuelvan a esta plaza, a gritar con el puño en alto, con pulmones rotos, que no sean carne de cañón, que no canten por monedas los hijos de sus hijos. La gente pasa, nosotros también, ya son las nueve, el Potter ese dura 3 horas 15 y no me interesan los adolescentes ingleses.

Once de la noche, no puedo dormir, camine todo El Prado, escuchando opiniones de política. De pronto el Kaluyo y sus risitas de arroz blanco me arrullan, me duermo escuchando el aplauso mudo de mil golosinas en sus ojos.

El domingo es día de elecciones, votemos por un cambio social de fondo en el país

jueves, diciembre 15, 2005

Calamaro y viejas miradas


Perdimos la clara cordura de media semana, con un tinto y escuchando los aires de tango de Andrés en el Luna Park. Ella se escondió de las fotos. Su mirada, miel profunda, se negó a jugar con las luces de una cámara y sus pupilas taladrarón de nuevo con el mismo perverso efecto aguja en mis ojos.

Tango, Lou Reed y más, música, mil veces música. Vino y este encuentro nocturno de miradas con sabor añejo. La noche fué palabras y uno que otro tacto. Quedaron el vino, un blues y el homenaje de Andrés a Pappo, latiendo en el corazón.

No se por qué imaginé que estábamos unidos y me sentí mejor, pero aquí estoy, tan solo en la vida que mejor me voy. (Norberto Napoletano, Pappo)

miércoles, diciembre 14, 2005

Los restos de nuestro amor


La sien late perforando el vacío
el aroma verde inunda mi garganta
visión en tunel, mirada gris
Te devuelvo cada pieza de esta historia mal armada


lunes, diciembre 12, 2005

Resaca


Quieto deshojar de oscuras líneas,
Llorar desnudo en el espejo.
Cáliz absurdo de carne y cicuta

Nausea endeble,
Culpa que se pierde
Temor de miedo turbulento

Grito nocturno
metamorfosis lenta que agota
y anula carcajadas.

Paso a paso, despertares,
tacto en reconocimiento
Rostro saltado, cuerpo incompleto

Mirada resuelta de espejo.
Muda mentira,
bebiendo la duda del monstruo

Llenar el alma en mudas digestiones
Levantar simples miradas al sonido
Volar y carcomer silabas sangradas

Rigor de anestesia, arrogante
Falso poeta de encierro
Vuela en la resaca.

Levántate ahora, respira y vuelve
Instala el asco en pantallas globales.
Poco arte te nombra, poco verso te sostiene.

Decepción de estepario
Caerá dulce en tu sagrada espera
Disuelto de emoción y vanidades

Evanescente viva
Ineludible tu espanto
Incontenible mi llanto,
Tu náusea,
resaca de existir.

viernes, diciembre 02, 2005

Cerrar las puertas

Arbol Dali, Reserva Eduardo Abaroa, Potosí Bolivia Foto Cortesia Isabel Hurtado

Firme y sus caricias secas tornean mi frente
Firme y el viento no me mueve.
Expuesto, como una forma de hacer público lo intimo, de compartir histriónicamente mi existencia.
Colgarme de algún espacio ajeno, ponerme en vitrina, firme ante las miradas de aquel otro, ¿hasta dónde es valido?
El silencio por hoy es necesario,
cerrar las puertas,
dejar que el viento recicle experiencias,
caminar la ciudad, tomar sus calles por asalto
y retornar con la palabra renovada y llena de otros ojos.

jueves, diciembre 01, 2005

Dia mundial del Sida


Hoy es el día mundial del SIDA. En Bolivia, según el SEDES se han notificado 1.720 casos de VIH/sida en el país, es decir que se han incrementado en casi un 2.000 por ciento. La realidad es otra, ya que la estadística oficial es de casos registrados, es imposible saber la cantidad de portadores silenciosos viviendo con el virus.

Vivir con el VIH en Bolivia es una guerra diaria, me lo cuentan amigos que viven con el virus.:

“La muerte es una certeza para todos, la única diferencia que el VIH te la hace más evidente, uno reza cada vez que se resfría, que se hace una herida, que el cuerpo responda, que las defensas estén intactas”.

"Es una batalla conseguir medicamentos para el mes, aguantar la sequedad de boca, las nauseas, los dolores de cabeza diarios del tratamiento “ya no puedes tomar un trago en paz, fumarte un pucho, comer en la calle cualquier cosa, ponerte de mal humor. Hay que evitar cualquier cosa que baje las defensas, entre ellas el estrés. Imaginate, no hay medicamentos, hay discriminación en todo lado y encima hay que vivir sonriente por que si no las defensas bajan, hay que hacer ejercicio, no preocuparse, por que si no el maldito virus despierta”.

"Tengo 18 años, vivo en la calle, soy clefero, nos hablan del SIDA que eso mata, a mi la verdad, no me importa mucho, eso del preservativo, de cuidarse, al final es más seguro que muera de hambre frío o acuchillado antes que de SIDA, aca nos metemos todos con todos, cuantos viviremos con SIDA, no sé, al final lo que nos maté y saque de esta mierda mejor".

"Vine a La Paz a hacer turismo, luego por gil me anime a llevar un poco de coca a España, me agarraron a mi y a mi mujer, estoy en San Pedro hace 2 años, soy portador del virus, vivo con VIH hace 8 años. Dejé de tomar mis medicamentos desde que estoy en San Pedro, recluido como rata en la muralla, sin comida, sin techo y mi salud está cada vez peor y se que no cuento con mucho tiempo, solo pido ser repatriado para terminar mi pena en España y ver a mi familia antes de morir".

"Soy madre de familia, 24 años, me casé virgen, vivo con el Virus hace 3 años, me lo contagió mi marido en casa, el se fué cuando le dije que tenía VIH, lo veo de ves en cuando, se dedico a la joda, a seguir viviendo su vida promiscua. Yo tengo que seguir viva, lo más que pueda, viva por mis hijos."

"Es una batalla, cuando asumes vivir con el virus, una lucha diaria por conseguir los medicamentos, por luchar contra la discriminación, yo soy una persona igual a tí, el virus no se ve, pero cuando me presento digo hola me llamo Patricia y soy VIH, veo las caras de espanto de unos, las miradas de lástima de otros. Vivir con el VIH y asumirlo es aún más difícil, no sabes la la batalla que es conseguir un dentista que te quiera curar, que no te mire raro cuando eres VIH, lo difícil que es conseguir pareja, más aún si eres mujer. “lo que una recibe es lástima, compasión, yo te voy a cuidar, estar a tu lado” pero luego? Se hacen gas, se escapan, no se animan, más aún, imposible animarse a ser madre en Bolivia, por hay justo el día de la cesárea, algo falla, no se consigue los medicamentos que hay que dar de inmediato al bebe, para que no sea portador”.

Hay amigos, que me dicen que prefieren no tomar medicamentos, que prefieren cambiar de hábitos, cuidarse y prolongar así al máximo la vida sin síntomas.

“si empiezas el tratamiento no puedes terminar de por vida, no puedes olvidarte ni una pastilla, y en este país, que el Ministerio de Salud y el SEDES, negocian con el Fondo Común, para medicamentos es peor”

El Virus, va creciendo silencioso, alojándose en la sangre, de miles más, que no lo saben que no se animan, el problema es que pensamos que es más fácil evitar, callar el tema, pensar que a uno no le tocará, creer que estamos en Bolivia y acá esas cosas no llegan, cuando la verdad es que el país, está como África hace 15 años y si seguimos así en 10 más veremos al 30% de la gente viviendo con el virus y cada vez más muriendo de SIDA.

Pensar en el VIH, es aceptar una realidad que está con nosotros, no sólo el 1 de Diciembre, si no todos los días de nuestra vida, por que al final de cuentas El VIH no es una sentencia de muerte el silencio si lo es.

En La Paz, si te animas a hacerte la prueba, no lo hagas en cualquier lado, ve al Centro Piloto de la Avenida Montes Telf 2450026, es el único lugar donde recibirás consejería psicológica antes y después de la prueba. Es una sola vez, solo 25 bs y te quitas la incertidumbre.

Más Info en:

http://www.unaids.org/en/default.asp