Nada que decir, sólo restos de mar rompiendo las paredes.
recuerdos que se filtran en cascadita de ausencias,
en surcos abiertos por arañazos de piel.
Se anda escapando la memoria chorro a chorro,
en cada silente homenaje secando el cuerpo de roca,
en cada tacto cristalizado en la piedra.
Por suerte el pecho es de granito
y es invierno
y hace sol
y el aire esta seco
y no llueven aromas.
Las grietas de julio sanan con Mentisán.
3 comentarios:
Veo que te fuiste otra vez a la mierda, con ese tu aire nostálgico con esa melancolía con la que disfrutas las heridas que te dejan las patadas de mula.
Seguro te animaste en la retirada a darle un pellizquito en la mano, timido y luego de escuchar mil consejos y leer los manuales esos de como ser indiferente con el amor perdido y no morir en el intento ajjaj
Bueno, te digo todo esto por que me di cuenta que otra vez como la canción de Llegas caiste en eso de miedo de estar solo se disfraza de amor y ahora ventilas tu decepción en público para recibir consuelos, aplausos o hurras.
Si solo miraras cerca tuyo y te quitaras los ojos de caballo para ver los restos de esa que te dió sólo compasión aprenderías que mujeres que queremos ser compañeras tuyas y con MAYUSCULA habemos varías. Apurate antes que me pierda en otro mar y mi espalda ya no quiera curar heridas
BESOS
Uhhhhhhhh que densa la amiga! Me gusta su estilo.
Aunque no me has llamado Paul y me has dejado con ganas de tomar un vinito en Bellavista, debo decirte que con estas paredes cubiertas de invierno, vuelo a buscar una espalda.
Súper lindo el escrito.
jajajaa... bueno la patada voladora del anónimo terminó con una sutil insinuación, eh?
El texto creo que invita a muchas interpretaciones, sin embargo talvez la imagen primera sea ese frío que corre por la espalda cuando llega invierno y nuestra soledad se la siente más que nunca.
Saludos
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